Diseño experimental para la evaluación de perfiles de resistencia UV y habilidades de fotorreparación del ADN en extremófilos

Virginia Helena Albarracín, Julio Ricardo Moreno, Wolfgang Gärtner, María Eugenia Farías

Resumen


La radiación ultravioleta (UV) es un tipo de radiación electromagnética, de una longitud de onda más corta que la de la luz visible (por debajo de 400 nm). La luz UV es un componente de la luz solar y es emitida por los arcos eléctricos y fuentes de luz especializadas tales como las luces negras. De acuerdo con las respuestas biológicas, la luz UV se puede dividir en tres tipos: UV-A, UV-B y UV-C. Altas dosis de UV, en especial UV-B (280-320 nm) causan daños en las células. Tanto la luz UV indirecta como directa son perjudiciales para la vida, debido a la fuerte absorción de longitudes de onda inferiores a 320 nm por parte del ADN. La luz UV-A (320 a 400 nm) causa sólo daño indirecto a ADN, proteínas y lípidos a través de la generación de intermediarios reactivos del oxígeno. Los productos más comunes, producidos la radiación por UV sobre el ADN, son dímeros de pirimidina-ciclobutano (CPD). Bajo condiciones de estrés extremo por UV, se sabe que, en las bacterias,  aumentan las mutaciones, como último mecanismo de resistencia, conocidos como errores de reparación de derivación, que permite pasar por alto las lesiones durante la replicación del ADN. En condiciones normales, estas lesiones bloquearían la replicación por la ADN polimerasa III, pero en el caso de los daños causados por radiación UV, este mecanismo evita que la célula replique su ADN y así es capaz de sobrevivir con lesiones no reparadas. Por razones obvias, esto se traduce en un alto número de mutaciones.


Palabras clave


Acinetobacter. Extremófilos. Luz ultravioleta. Lagunas de Altura. Fotorreactivación. Fotorreparación. Dímeros de Pirimidina. Bioinformática. Genes. Fotoliasas. PCR. Lesiones en el ADN. Luz azul. Flavoproteínas

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